¿Por qué importa tanto el almacenamiento?
El cannabis es una planta rica en compuestos delicados: los cannabinoides (como el THC y el CBD) y los terpenos, responsables de sus efectos y aromas. Estos compuestos se degradan o evaporan si no se almacenan correctamente. Además, la marihuana es susceptible al moho y a la contaminación bacteriana, lo que puede hacerla inutilizable o incluso peligrosa para la salud.
Los enemigos silenciosos del cannabis
Antes de hablar de soluciones, conviene conocer a los “enemigos” de la marihuana almacenada:
- El aire: El oxígeno oxida los cannabinoides y terpenos, reduciendo potencia y sabor.
- La luz: La radiación ultravioleta destruye rápidamente el THC.
- La humedad: Un exceso puede provocar moho; la sequedad extrema, cogollos quebradizos y sin aroma.
- El calor: Las temperaturas altas aceleran la descomposición de los compuestos activos.
¿Cómo lo hacen los expertos?
Los cultivadores experimentados y dispensarios suelen utilizar frascos de vidrio herméticos, almacenados en lugares frescos y oscuros. Muchos añaden sobres reguladores de humedad (como los de la marca Bóveda) para mantener el rango ideal (55-62%). Algunos incluso emplean envases de acero inoxidable, que aíslan aún mejor el contenido.
¿Y las bolsas de plástico?
Aunque son prácticas, las bolsas de plástico son el peor enemigo del cannabis: permiten el paso del aire, generan electricidad estática (que arrastra los preciados tricomas) y no protegen de la luz. Si solo tienes bolsas, úsalas solo para transporte, nunca para almacenamiento prolongado.
Trucos caseros para conservar mejor tu marihuana
- Recicla tarros de vidrio: Los botes de mermelada o conservas, bien lavados y secos, son una alternativa económica y eficaz.
- Evita abrir y cerrar el envase constantemente: Cada vez que lo haces, entra aire y humedad. Divide tu cannabis en pequeñas cantidades si lo usas a diario.
- No mezcles variedades: Cada tipo puede tener necesidades distintas de humedad y aroma; además, los olores se mezclan y pierdes matices.
¿Congelar o no congelar?
La congelación es un tema polémico. Si bien puede conservar la marihuana durante mucho tiempo, el frío extremo puede romper los tricomas y alterar el sabor. Solo se recomienda para grandes cantidades y, si se hace, es mejor descongelar lentamente en la nevera antes de abrir el envase.
¿Cuánto tiempo dura bien conservada?
Si sigues estos consejos, tu cannabis puede mantener su potencia y aroma durante 6 meses a un año. Pasado ese tiempo, no es que se vuelva peligrosa, pero sí perderá parte de su sabor y efecto. Un truco: si huele raro, sabe a humedad o ves moho, mejor no arriesgarse.
Bonus: conservación de semillas
Para quienes guardan semillas, lo ideal es un lugar fresco y seco, preferiblemente en el frigorífico, dentro de un recipiente hermético y opaco. Así mantendrán su poder de germinación durante años.
En resumen
Conservar bien tu cannabis no es complicado, pero sí requiere atención a los detalles. Un buen almacenamiento marca la diferencia entre una experiencia mediocre y una inolvidable. Así que la próxima vez que compres o coseches, dedica unos minutos a cuidar tu hierba: tu paladar (y tu salud) te lo agradecerán.