¿Por qué hacer mantequilla de cannabis?
La mantequilla cannábica es ideal tanto para quienes desean consumir cannabis con fines recreativos como para quienes buscan sus propiedades medicinales, evitando así fumar o vaporizar. Al ingerirla, los efectos suelen ser más prolongados e intensos, por lo que es importante prestar atención a las dosis y empezar siempre con cantidades pequeñas si eres principiante.
Ingredientes y materiales
Para preparar una mantequilla de cannabis casera, necesitarás:
- 150 gramos de mantequilla sin sal
- 8-10 gramos de cogollos de cannabis (o 18-20 gramos de hojas con resina)
- 250 ml de agua
- Una olla mediana
- Un colador fino o una tela para filtrar
- Un recipiente para conservar la mantequilla
Paso a paso: cómo preparar mantequilla de cannabis
1. Desmenuza el cannabis
Tritura los cogollos o las hojas con resina utilizando un grinder o simplemente con las manos. Cuanto más fina sea la materia vegetal, mejor se mezclará con la mantequilla y más eficiente será la extracción de cannabinoides.
2. Limpia la materia vegetal (opcional, pero recomendado)
Para eliminar impurezas y parte de la clorofila, hierve el cannabis triturado en agua a fuego suave durante unos 15-20 minutos. Después, escurre bien la materia vegetal con ayuda de un colador. Este paso ayuda a mejorar el sabor final de la mantequilla.
3. Derrite la mantequilla
En una olla limpia, añade la mantequilla y el agua. Calienta a fuego muy bajo, removiendo hasta que la mantequilla se derrita por completo. El agua ayuda a que la mantequilla no se queme y facilita la separación de residuos al final del proceso.
4. Infusiona el cannabis
Agrega el cannabis desmenuzado a la mezcla de mantequilla derretida y agua. Mantén la mezcla a fuego muy bajo, sin que llegue a hervir, durante al menos 45 minutos a una hora. Remueve de vez en cuando para evitar que se pegue o se queme. A mayor tiempo de cocción, mayor será la extracción, pero no es recomendable superar las dos horas para evitar sabores amargos.
5. Filtra la mantequilla
Pasado el tiempo de cocción, cuela la mezcla utilizando un colador fino o una tela, presionando suavemente para extraer toda la mantequilla posible. Descarta los restos vegetales.
6. Deja enfriar y separa
Vierte la mantequilla líquida en un recipiente y deja enfriar a temperatura ambiente. Luego, refrigera hasta que la mantequilla se solidifique. El agua quedará en el fondo y la mantequilla en la superficie; retira la mantequilla y desecha el agua restante.
Consejos de uso y conservación
- Guarda la mantequilla cannábica en un recipiente hermético en la nevera hasta por dos semanas, o congélala para conservarla durante varios meses.
- Utilízala como base para postres, galletas, brownies, o incluso para untar en pan o mezclar en salsas y cremas. Recuerda no exponerla a temperaturas muy altas para evitar que los cannabinoides se degraden.
- Empieza siempre con pequeñas cantidades en tus recetas, ya que los efectos pueden tardar más en aparecer y ser más potentes que al fumar.
Precauciones
El consumo de cannabis en alimentos produce efectos más intensos y duraderos. Si es la primera vez que pruebas la mantequilla de cannabis, comienza con una dosis baja y espera al menos una hora antes de consumir más. Mantén siempre fuera del alcance de niños y mascotas.
En resumen, la mantequilla de cannabis es una alternativa sencilla y eficaz para incorporar los beneficios del cannabis a tu cocina diaria. Siguiendo estos pasos y recomendaciones, podrás disfrutar de recetas originales y seguras, adaptadas a tus gustos y necesidades